Repatriación de datos, la información también se puede mudar

Repatriación de datos, la información también se puede mudar

Repatriación de datos, la información también se puede mudar

La nube pública aporta muchos beneficios, pero a veces no son suficientes y es necesario repatriar los datos a un sistema local.

Cristina Cueto

20/10/2023

Gestión de Infraestructura SAP

¿Te imaginas meter todos los datos de una compañía en unas cajas y hacer una mudanza con ellos como con los muebles de una oficina? Estamos ante una situación irreal hoy en día, ya que no es algo factible meter los datos en cajas y moverlos de un sitio a otro. Primero porque son demasiados, y segundo porque ya no se almacenan en papel en casi ninguna situación. 

No obstante, sí que se puede mover los datos de un sitio a otro. Hablamos de la repatriación de datos, que, más técnicamente hablando, consiste en el proceso mediante el cuál, se mueven los datos desde la nube hasta un almacenamiento de datos local (on premise) o bien se combinan el local con la nube.

Teniendo en cuenta los beneficios de la nube pública, como pueden ser la eficiencia, la escalabilidad, o la capacidad para consolidar funciones con menos equipamiento, también hay que tener en cuenta algunos riesgos y costes. Es por esto que muchas organizaciones están sacando sus datos de la nube y devolviéndolos a sus sistemas locales.

Ventajas de la repatriación de datos

El hecho de devolver los datos a los sistemas locales a través de un proceso de repatriación tiene varias ventajas:

  • Menos costes: Esta es sin duda, la principal ventaja para las compañías. Una vez que los datos están en una nube pública, los costes pueden empezar a aumentar rápidamente como la factura de un restaurante o la cuenta de un bar. Debido a ello, los costes de uso de la nube pública pueden acabar siendo mucho más altos que los que genera el mantenimiento de un centro de datos propio.

 

  • Mayor seguridad: La seguridad de los datos de una compañía es su mayor abal. La nube tiene muchas cosas positivas pero es cierto que el grado de preocupación de las compañías con la información que tienen en el cloud es notable. El problema no es que la nube sea intrínsecamente insegura o esté desprotegida. La cuestión es que, para que cualquier despliegue en la nube esté (y se mantenga) bien protegido frente a las vulneraciones de datos y los ciberataques, hay una serie de cosas relacionadas con las políticas de seguridad, las configuraciones de la arquitectura, el cumplimiento normativo, la ubicación de los datos y otros factores que tienen que ser correctas (o que pueden fallar).

Dicho todo esto, la repatriación de los datos significa que automáticamente consigue un nuevo nivel de proximidad con los datos y de control físico de los mismos.